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miércoles, 16 de febrero de 2011

QUIEN ESTÉ LIBRE DE CULPA QUE TIRE LA PRIMERA PIEDRA

Hace unos días estaba conduciendo, y mientras estaba parado en un semáforo, cruzó la calle un par de ciclistas: padre e hijo. El padre iba en cabeza, su hijo le seguía y ambos llevaban casco; aunque lo que me llamó la atención fue que el padre llevaba puesto el casco como un sombrero mejicano: Esto es atado en el cuello y el casco reposando sobre las espaldas. Afortunadamente el pequeño sí lo llevaba correctamente.
Ante esta vision me iba a quedar ancho poniendo de vuelta y media la irresponsabilidad del progenitor y la poca falta de criterio ya que se había tomado la molestia de utilizar un casco, aunque esa forma de llevarlo no hiciera ningún beneficio, si no todo lo contrario.



Pero cuando estaba empezando a escribir estas lineas he caído en la cuenta de que cuando utilizo el bicing, no suelo utilizar el casco; así que todo lo malo que pudiera decir acerca de ser un mal ejemplo por utilizar inadecuadamente el casco, o los beneficios de usarlo al practicar ciclismo no servirán de nada si yo mismo no predico con el ejemplo.
Sólo me queda ser humilde y consecuente con mis creencias. Y ser conocedor que nada diferencia el que utilice un tipo de bicicleta u otro; el bicing puede ser un sistema de transporte público sostenible y los responsables del Ajuntament de Barcelona pueden hacer la vista gorda con la aplicación de las normativas, pero el riesgo  y las consecuencias de carecer de casco practicando ciclismo son los mismos.
Así que amig@: PÓNTELO, PÓNSELO
Mi grano de arena a predicar con el ejemplo será utilizar el casco siempre que use la bicicleta. Confío en que la estampa de ver un bicingista con casco no sea lo extraordinario que es hoy en día.

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