Se llame como se llame, tenga el nombre registrado o no, un ironman es un ironman. Si te suena pero no sabes en qué consiste, te lo explico rápidamente: 1,9km natación + 180km ciclismo + 42km carrera a pie.
El ironman tiene su origen en Hawaii, en 1978, cuando un infante de marina propuso combinar las tres disciplinas para saber qué atletas eran mejores (nadadores, corredores o ciclistas). Las pruebas eran la Waikiki Roughwater Swim de natación (4 km), la Around-Oahu Bike Race de ciclismo (180 km) y el Marathon of Honolulu (42 km). John Collins (el infante de marina) propuso hacer las tres seguidas. El ganador sería considerado el "Ironman" (Hombre de Hierro). Posteriormente se han realizado estas competiciones a lo largo y ancho del planeta dejando tras de sí ese halo de leyenda y admiración.
Después de haber hecho algunas de las nuestras Sergi y un servidor hablamos para fijar nuestro próximo objetivo en el Ironman de Niza (Al que por cierto sí que irá Josep!!!) pero si el entreno ya implica mucho sacrificio, también hay que añadir el esfuerzo económico y la fecha de Niza (junio de 2011) la veía muy justa para disputar la prueba en condiciones.
Dicho esto convencí a Sergi para virar el punto de mira de Niza al Challenge de Barcelona, que se desarrolla en el Maresme; las ventajas principales son que "corremos" en casa y se disputa en octubre, con lo que ya disponía de casi 3 meses más para prepararme. Así que en noviembre nos inscribimos siendo conscientes de lo que ello implicaba.
Dicen que una prueba de resistencia de estas características se divide en 20% físico y 80% psicológico. Yo voy a seguir mi pauta de entrenamiento y voy respeteando encarecidamente los descansos.
El tiempo medio en acabar la prueba son unas 12h y hay un límite de 17h (desde las 7h de la mañana hasta las 24h de la noche) aunque mi objetivo es simplemente acabar. Piano, piano...
